martes, 30 de abril de 2013

¿Quién será el que dé el primer paso?


¿Quién dejará
que nuestros sueños
vuelen de nuevo?
¿Quién dibujará
en nuestra mirada
la alegría?
¿Quién borrará con besos
la distancia
entre nuestra ausencia y el amor?
¿Quién? ¿Tú o yo?
¿Quién será 
el que dé el primer paso?
O ¿seguiremos
hilando el nudo del olvido
hasta dejar de ser?

domingo, 28 de abril de 2013

Sus sueños habitaron los del otro




El día en que sus sueños
habitaron los del otro,
ya las palabras vivían
en su mente;
el amor era feliz
recorriendo sus pieles;
en cada curva de sus cuerpos
la boca y las manos se perdían.
Cuando se miraban
veían el universo entero
y una bandada de sueños
los seguían por doquier.
Hasta el silencio 
les hablaba de amor
y ellos sólo se hablaban con amor.
Desde que se encontraron
estaban enamorándose del otro.
Sus sueños
eran palabras que habitaban
la piel del otro.
Ya no vivían en este mundo,
ya no vivían, solo soñaban,
soñaban poemas.

martes, 16 de abril de 2013

Te miro de lejos



Te miro desde lejos.
Aunque no quiero 
te miro y no te miro
y te vuelvo a mirar.
Ahora este mirar
no es mío, es tuyo.
Te miro desde lejos
sin tregua,
sin desfallecer,
sin desesperarme,
sabiendo desde ya
que al voltear a mirarme,
al fin,
dejaré de ser tuyo
o serás mía para siempre.

Deseos


Deseo desandar 
con mis manos
la suave línea de tu pecho,
dibujarla,
rozar tu cielo con mi lengua.
Deseo acariciar 
con mi boca tu mar,
zambullirme en él
y nadar en tu universo
mil veces.
Pero lo que más deseo
es sencillo:
ser el mar donde
nades para siempre.

domingo, 14 de abril de 2013

Quereres



Quiero
ser el río
que desemboca en tu mar,
fundirme en ti,
navegar juntos
cada una de las incógnitas
de la vida
y desandar cada día
que me quede
contigo de la mano.
Quiero ver
contigo a mi lado
cada atardecer
y cada amanecer del universo
como si fuéramos
los últimos navegantes
que conocen los secretos 
del otro lado de los sueños.

miércoles, 10 de abril de 2013

Poema del marinero



Quiero
desprenderme de la tristeza
y del
silencio de esta larga singladura;
anclar mis sueños en tu mar.
Quiero
pasar este último otoño
en la tierra firme de tu amor,
desandar las playas y
contarte las mil historias
que la vida me ha dejado.
Quiero
tomarte de la mano
para ver
 cómo la oscuridad
le roba las olas al océano;
oír el canto
de la noche y el viento marino.
Quiero 
amarte hasta que el sol
se asome de nuevo en nuestra playa
y cada mañana al despertar 
volver a naufragar en tu mirada.